Una de las frases que más estoy repitiendo últimamente es…”Con lo bien que íbamos…”. Y es verdad… ahora que estábamos entrando en una fase de crecimiento moderado, llega este bicho y nos ha cambiado todo el escenario social, económico y político.
No cabe duda de que vamos a tardar mucho tiempo en recuperarnos y en degustar esos placeres que hasta hace poco no valorábamos y que la costumbre los había transformado en cotidianos.
En lo que respecta al escenario laboral y de nómina, está claro que ya estamos inmersos en un proceso de cambio total en tanto en cuanto la forma de trabajar ha dado un giro de 180 grados derivando hacia un teletrabajo que es necesario regular.
Las medidas de conciliación familiar se están consolidando, ya no solo el teletrabajo en sí sino también la potenciación de la flexibilidad de horario de cara a conseguir que el empleado se sienta más cómodo y se adapte mucho mejor dentro de la organización.
Como consecuencia de todo ello, las empresas están tomando medidas y cambiando sus mapas de conceptos de nómina. Desde Seresco nos estamos adaptando de forma rápida y eficiente dando soluciones a esas nuevas necesidades tales como:
- Parametrizaciones de nuevos conceptos del tipo “Trabajo desde casa” donde las empresas abonan importes para sufragar los gastos en los que el empleado incurre.
- Modificaciones de otros como los de “Ayuda Comida” ya que los empleados dejan de tener que gastar en comer fuera de su domicilio y se reparametrizan para adecuarlos a los nuevos requisitos.
- Configuración de procesos de ERTE con sus correspondientes complementos acordados ya que muchos de nuestros clientes se han visto abocados a la apertura de este tipo de expedientes de regulación.
Hay que ser optimista y, aunque estamos en una fase de gran incertidumbre, estoy seguro de que con el apoyo de todos los agentes sociales, empresas y gobierno se regularizará un marco legal donde se pueda asegurar un futuro próspero. “La rueda no puede dejar de girar”.
¡Entre todos lo conseguiremos!
