En este caso, por héroes no me refiero a tipos con visión de rayos x, fuerza sobrenatural o capacidad para volar, por nombrar algunos de los poderes que todos conocemos y admiramos en nuestros personajes favoritos de ficción.
Como ha llegado el ansiado veranito, hay muchas personas de vacaciones, y muchas de estas vacaciones dependen de superhéroes, este ratito quería dedicárselo a ellos, a los monitores y colaboradores del Grupo Scout San Gabriel y como no a todos aquellos que invierten su tiempo libre, uno de los tesoros más maravillosos que tenemos, en hacer de forma totalmente altruista que los niños tengan experiencias que contribuyan a su desarrollo, adquiriendo valores muy importantes y a mi parecer escasos en la sociedad en la que estamos inmersos.
Yo personalmente he tenido el honor y el placer de compartir con ellos una de sus experiencias, aunque en mi caso ha sido breve. Desde luego, nada que ver con la impresionante labor previa y posteriormente puesta en el terreno de este grupo de hombres y mujeres que invierten su tiempo con muchísima responsabilidad, sin esperar a que a final de mes les llegue una remuneración económica como contrapartida al trabajo realizado.
Este verano, han donado 10 días de su tiempo y cientos de horas de organización para montar un campamento que perdurará en el recuerdo de muchos niños.
Parece muy difícil así contado, ¿verdad?….
Claro que lo es, pero hay que entender que estas personas no son normales, son superhéroes y sus súper-poderes les capacitan para realizar estos actos sin esperar nada material a cambio, ¡…como Superman…!.
Tienen el súper-poder de la súper-fuerza de voluntad. Fin de semana tras fin de semana dedican muchas horas sonrientes a ejecutar actividades con niños de todas las edades que previamente diseñan durante meses y meses.
Estas señoras y señores, jovencitas y jovencitos, tienen el súper-poder de viajar en el tiempo. Meses antes del comienzo del campamento se trasladan al lugar y realizan cada una de las actividades previendo cualquier contingencia que pueda acontecer.
También tienen el súper-poder de la anticipación. Aunque anteriormente ya han vislumbrado que pude suceder, son capaces de cambiar el futuro anticipándose a cualquier problema que pueda surgir, pues están constantemente vigilantes con cada uno de sus súper-sentidos.
Tienen súper-visión de rayos x. Son capaces de ver dentro de las personas, detectan estados de ánimo, problemas y ayudan a superarlos con el súper-poder de la comprensión y la empatía. Bueno estos dos últimos no son súper-poderes de forma estricta, pero debido a la escasez que de ellos existen entre nosotros los mortales, creo que podrían tenerse en cuenta.
Sus súper-cuerpos son de hierro. No les afectan los malos rollos, opiniones negativas chascarrillos y demás impedimentos para tener una mente positiva.
Esto por mencionar algunos de sus súper-poderes, pero tienen muchísimos más que utilizan en su día a día y les capacitan como verdaderos superhéroes. Algunos demasiado importantes como para no reparar en ellos, son personas integras, personas buenas, de confianza y sensibles con el entorno,…
Son súper-humanos, que en ocasiones han derramado alguna que otra lagrima de emoción.
La misión de todos nosotros es ayudarles para que continúen con lo que hacen, intentando parecernos a ellos y participando cuando sea posible aunque tengamos que sacrificarnos un poquitín.
De esta forma creo que conseguiremos que superhéroes como los monitores del Grupo Scout San Gabriel y otros dispuestos a ayudar en cualquier rincón del mundo, no tiren la toalla y se vayan a sus planetas dejándonos vulnerables al egoísmo, la intolerancia, o la injusticia…etc.
Uno de ellos me dijo una vez;
“…pero como no voy a cobrar nómina a fin de mes por mis servicios… ¡desde luego que la cobro!.., en el lugar de las retenciones está “solamente” el tiempo invertido…, pero en el de los devengos… ¡Ay amigo!… en el de los devengos… (y con ojos redondos y sensación de plenitud me dijo…)
…en el de los devengos está todo lo demás… que es mucho…”