Una pregunta: ¿tu empresa tiene departamento de recursos humanos propio o no? Esta pregunta ya es muy común en muchísimas empresas españolas, pero hasta hace poco era difícil pensar en una organización sin su propio departamento interno de Recursos Humanos. Los recursos humanos eran una de las funciones centrales sin las cuales ninguna empresa podría vivir pero… ¿qué está pasando ahora? La respuesta es la ‘terciarización’.
¿A qué nos referimos con terciarización? Está habiendo una transformación económica y social y por consiguiente, lo que es tendencia ahora, es un aumento del sector terciario o sea de los servicios.
Hoy en día, no es raro ver que las empresas subcontraten sus necesidades a agencias, empresas y profesionales que trabajan de forma remota. A medida que las organizaciones se esfuerzan por ser más eficientes, la dirección es liberar a la compañía de los departamentos no rentables, y RRHH es uno de ellos. De hecho, según un estudio, aproximadamente el 50% de las grandes empresas subcontratan sus necesidades de recursos humanos, ya sea en parte o en su totalidad.
Como en todos los casos se plantean dos vertientes, los que piensan que esto será un fracaso y no es bueno para la empresa y los que piensan todo lo contrario.
La externalización en general, no solo en recursos humanos, ofrece resultados positivos si se implementa de manera adecuada y estratégica. En el caso de la subcontratación de RRHH, está ya comprobado los beneficios a los que puede llevar, como:
1.- Más tiempo y recursos para centrarse en las competencias básicas. Habíamos dicho antes que recursos humanos es un departamento no rentable. ¿Qué significa esto? Al final del día, RRHH no produce, no crea productos o servicios y no contribuye al negocio como tal. Las grandes operaciones de recursos humanos requieren invertir mucho tiempo, dinero y recursos.
Al externalizar recursos humanos a una agencia externa, asociación o un profesional remoto, muchas empresas (especialmente las PYME y las nuevas empresas que trabajan con recursos limitados) pueden centrarse en las competencias vitales, el core de su negocio.
2.- La subcontratación de funciones de recursos humanos a un proveedor externo permite que, incluso las empresas con poco efectivo contraten los servicios de profesionales de recursos humanos altamente experimentados. Hacerlo de esta manera es significativamente más barato en comparación con el coste de contratar a departamento de RRHH interno con el mismo calibre de experiencia.
3.- Mejora el reclutamiento. Convencer al mejor talento para elegir trabajar para una organización determinada sobre otra oferta es un arte y una ciencia. La contratación externa de profesionales de recursos humanos que se especializan en esta área puede mejorar la calidad de la atracción de talento para una empresa.
4.- Pueden acceder a los softwares más sofisticados y mejores externalizando el servicio ya que si lo tuvieran en interno sería mucho más costoso poder acceder a él.
Dicho esto, recurrir a estos proveedores de servicios de recursos humanos les da a las empresas acceso a las tecnologías que de otra manera no se presupuestarían.
Ahora bien, a algunos expertos en recursos humanos les preocupa que la tendencia a externalizar haya ido demasiado lejos, hasta el punto de que los empleados puedan estar sufriendo en áreas como la capacitación y el desarrollo profesional.
Específicamente, varios expertos en RRHH plantearon algunas inquietudes sobre la subcontratación de talento, pues los equipos internos de recursos humanos tendrían objetivos alineados con la empresa para la que trabajan. Estarían realmente preocupados por la gestión del talento y el desarrollo. Los proveedores externos pueden proporcionar un servicio deficiente y puede que ni siquiera se preocupen por cosas importantes, no tangibles, como la cultura corporativa. Ellos no solo tienen a tu empresa como cliente, tiene muchas más y puede ser que el servicio no sea lo que tu propio departamento realizaría internamente.
Es importante que las empresas puedan monitorear, rastrear y medir las horas registradas por sus consultores de recursos humanos remotos para ejecutar el alcance de trabajo acordado. Esto debe hacerse de manera tal que los datos se registren de manera precisa y veraz, y estén disponibles para que las empresas puedan tomar decisiones inteligentes sobre RRHH.
También se plantea el impacto negativo en la cultura de la empresa. Los grandes equipos internos de Recursos Humanos actúan como defensores de los empleados. Resuelven conflictos internos, se ocupan de su carrera y desarrollo personal y superan las brechas de comunicación entre el personal y la administración. Los equipos de recursos humanos externos no se preocupan tanto por estas cosas, lo que afecta negativamente la moral y la cultura general del lugar de trabajo.
Como todo en la vida tiene sus pros y sus contras y es evidente que la externalización es un arma de doble filo:
‘La clave para el éxito de la subcontratación de recursos humanos es que se haga una buena elección de la empresas a contratar, o sea, tener la habilidad para asociarse con un proveedor de servicios externo de RRHH con quien la compañía puede construir una relación basada en la confianza y el respeto mutuos’.
